lunes, 21 de abril de 2014
Ya que tenía el día libre en el trabajo, me dispuse a disfrutar pescando barbos este viernes. La verdad que no es el mejor momento para ello, más bien el peor. La previsiones meteorológicas no se cumplieron, pero eso no me impidió salir. El panorama no era nada alentador 8º, cielos nublados, cierta brisa que a veces rizaba el agua..... Pero nada es imposible, y si además conocemos las costumbres del barbo y los puntos calientes, su pesca en invierno a mosca es posible.
En esta época lo mejor es pescar con ninfas. Hay que tener en cuenta muchas variables a la hora de elegir la ninfa: grado de actividad, profundidad, fuerza de la corriente...vamos un mundo.
Por la mañana estuve pescando cerca de una chorrera donde se veían grupos de barbos acercarse a comer y subir y bajar la chorrera. Después de estar probando con la ninfa telyco, puse una imitación de stonefly negra. La mañana seguía igual hasta que apareció un grupo de 4 barbos justo cuando la ninfa salía de la chorrera, uno lo vio y la engulló. La verdad que me sorprendió ya que pese a ser de buen porte no tiraba tanto como cuando están en otras estaciones, cosas del invierno.
La mañana pasó entre vbarbos activos pero súper recelosos, muchos de ellos se descolgaban al ver la ninfa pero en esa persecución al acercarse me veían y salan escopetados. Ir como un ninja es poco para lo que tuve que hacer, pero aún así logre clavar otro barbo que me partió en la clavada, fallo mío por no revisar el bajo.....
Ya por la tarde todo siguió igual, hasta que en un remanso vi el movimiento de un barbo o dos removiendo el fondo. Sin dudarlo, me agaché y anudé una ninfa de quironómido sin plomar. Empecé a lanzar y ellos seguían a lo suyo, buena señal de que estaban hambrientos, hasta que recogiendo muyyyy lentamente la línea veo como el bajó se desplaza en dirección contraria. Sin duda, pegó el cachete y a disfrutar. Madre mía menuda batalla, éste ara nada estaba adormilado. Subía, bajaba, se metía entre las rocas, yo temía por mi bajo, pero el buen hacer hizo que finalmente se rindiera. Que preciosidad de pez, oro viejo. Después de disfrutarlo, foto y al agua.
