Nada mas llegar vimos bastantes pescadores de orilla por lo que decidimos alejarnos y buscar alguna zona mas solitaria y tranquila. Una vez en el agua empezamos a patear orilla. No era fácil pues el viento era fuerte y la actividad nula. 

Según fue avanzando el dia el sol calentó y el viento empezó a amainar. Entonces en una pequeña recula observe una mancha oscura moviéndose. Inconfundible era mi amigo bocagrande. Le lancé mi game changer al medio. Unos cuantos movimientos rápidos y cuando lo paro desde abajo lo ataca, pero no llega a comerselo entero, solo la cola por lo que no llega clavarse. ¡Maldita sea!.

Sigo avanzando pero esta vez con la mente puesta en los verdes. No cambio el bajo por si acaso.

Diviso otro pero por culpa del viento es demasiado tarde ya que el me ha visto ya. Avanzo más y justo observo unas ramas sumergidas cerca de la orilla. Lugar perfecto para mis amigos. Lanzo el streamer y le doy un tirón seco y justo de la nada aparece un buen tarugo que se lo come enterito. La lucha espectacular, y el pez lleno de energia y gordo. 

Se nota que está bien alimentado.

La mañana seguía, los peces apáticos pero a base de insistir siempre se logran los resultados y en una recula somera donde habia una estructura sumergida al segundo lance salio otro buen cacharro desde abajo. No tuve fortuna esta vez pues al ir justo a cogerlo dio un cabezazo y me dijo adios.......

Aun así me dejo disfrutarlo y contemplarlo un periodo corto de tiempo. 

Ya después el dia no dio para mas, pero para el mes de marzo y que ademas es invierno  pescandolos a mosca mas no se puede pedir...... ;-)